Reflexiones viendo ‘TVE 50’
Desde esta semana tengo el canal digital de Televisión Española TVE 50, donde se emiten los programas clásicos de la cadena pública que ya están digitalizados. Últimamente se están reponiendo sobre todo espacios de los primeros años ochenta, una época convulsa y muy intensa en España y también en toda Europa. Programas como ‘Buenas Noches’, ‘Musical Express’, ‘La Edad de Oro’ sembraron el comienzo de una forma de hacer televisión con grandes dosis de talento, riesgo y casi anticomercialidad, algo que en aquella época se podía permitir TVE.
Llama la atención también la falta de medios, la precariedad de las puestas en escena, e incluso una cierta ingenuidad por parte de los nuevos profesionales que entraban en TVE. Caras como la de Carmen Maura, Ángel Casas o Paloma Chamorro, por poner algún ejemplo, inyectaron el dinamismo y la frescura de una nueva etapa para España.
Lo que más echo de menos es la abundancia de programas musicales de calidad, donde se daban a conocer las nuevas propuestas nacionales e internacionales, alejándose de los grandes mercados y atendiendo únicamente a lo más interesante. Esto es algo totalmente impensable hoy día salvo excepciones como ‘iPop’ o ‘Los Conciertos de Radio 3’, espacios siempre supeditados a los rigores de las parrillas y relegados a horarios imposibles.
¿Qué hubiera sido de la ‘movida’ sin la televisión?