‘Peppermint Frappé’
Hacía algún tiempo que tenía ganas de ver ‘Peppermint Frappé’ de Carlos Saura y por fin este fin de semana he podido verla. La película es una de las primeras obras del realizador oscense y sólo dos años después de la magnífica (para mí la mejor) ‘La Caza’. Producida en 1967 por Elias Querejeta, es una de las primeras incursiones de José Luis López Vázquez en el cine «serio» y quizás una de sus mejores interpretaciones.
‘Peppermint Frappé’ cuenta la historia de Julián, un médico solterón de provincias ya entrado en años. El mundo que le rodea le resulta deprimente, aburrido y represivo. Él intenta guardar las formas, pero todo cambia cuando conoce a Elena, la esposa extranjera de Pablo, un amigo de toda la vida. Curiosamente, la chica se parece enormemente a Ana, la ayudante de Julián. Este parecido será el punto de partida para que sus obsesiones y represiones afloren hasta extremos insospechados.
Saura muestra su gusto por los contrastes. Provincianismo frente a cosmopolitismo (Ana frente a Elena o el Seat 850 de Julián frente al Chevrolet Corvette de Pablo). Tradición frente a vanguardia (por ejemplo en la exposición de pintura abstracta en un antiguo caserón de Cuenca). También destacaría el homenaje explícito que Saura hace a Luis Buñuel, con algunos guiños como los tambores de Calanda. La banda pop Los Canarios, de gran éxito en los sesenta, ponen la banda sonora con el pegadizo tema homónimo.
Tal y como he dicho en otras ocasiones con películas similares, ‘Peppermint Frappé’ es hija de su tiempo y debemos retrotraernos a aquella época para comprenderla en su integridad. Aún así se trata de una excelente obra y un auténtico clásico del cine español que obtuvo en 1967 el Oso de Plata del Festival de Cine de Berlín.