‘La Escafandra y la Mariposa’
Pocas veces una película tiene unos minutos iniciales tan angustiosos como ‘La Escafandra y la Mariposa’ (2007). El protagonista sufre síndrome de cautiverio: sólo puede mover los ojos, no puede hablar ni comunicarse con el exterior, pero está perfectamente consciente y sabe lo que ocurre a su alrededor. La cinta es una producción francesa dirigida por Julian Schnabel, un realizador bastante interesante que se llevó el galardón al mejor director del Festival de Cannes por este trabajo. Los dos conceptos centrales de la cinta son, como indica su título, la escafandra, una metáfora de la situación de aislamiento del personaje principal, y la mariposa, el contrapunto positivo, la imaginación, la capacidad intacta de creación y recuerdo.
Jean-Dominique Bauby es un fotógrafo de moda juerguista y mujeriego que sufre una embolia que lo lleva a quedar postrado en una cama, aislado del mundo exterior. No puede comer ni respirar por sí mismo. Esta nueva vida lo sumirá en el desánimo y en sus deseos de morir. Pero pronto se dará cuenta de que aún tiene muchas de sus facultades en perfecto estado y que utilizará para luchar por mejorar su estado, por hacer de esa reclusión forzada un lugar mejor. Durante esa pugna descubrirá nuevas facetas de su personalidad.
‘La Escafandra y la Mariposa’ destaca por su tratamiento visual, para mí algo gratuito, pero que no deja de ser soprender: planos descuadrados, desenfocados, distorsionados, cámaras flotantes… Pero sin duda lo mejor de la película es su guión, sólido y coherente, que sabe mezclar con habilidad y talento sueños, anhelos y fantasías con la realidad de forma que nada chirríe ni parezca forzado. Además, los toques de humor aportan distensión y refrescan una historia bastante desasosegante (impagable el episodio sobre la peregrinación a Lourdes). Y claro, el guión no es nada sin el buen trabajo de los actores, que también es sensacional, sobre todo los papeles del protagonista, Mathieu Amairic. Para terminar, en su banda sonora podemos escuchar temas de U2, Tom Waits, Velvet Underground o Joe Strummer. En definitiva, una película más que interesante.