‘La Desconocida’
Siempre es un gusto ver una nueva obra de Giuseppe Tornatore. A pesar de su juventud (nació en 1956), Tornatore se ha convertido ya en uno de los nuevos clásicos del cine italiano. Y como clásico, ha dirigido alguno de los grandes clásicos del cine contemporáneo como ‘Cinema Paradiso’ (que realizó con poco más de treinta años) y en general ha mantenido una carrera bastante coherente. Una de sus últimas películas es ‘La Desconocida’ (2006), una cinta con ambición de superproducción donde deja de un lado el melodrama para adentrarse en las siempre inciertas aguas del thriller. Un thriller que huye de las temáticas habituales de este género. Tornatore construye una obra de suspense con unas materias primas muy poco habituales.
‘La Desconocida’ cuenta la historia de Irina, una joven ucraniana con un pasado tortuoso vinculado a las oscuras mafias de la prostitución que la llevaron hasta Italia. Una vez alejada de ese traumático entorno, decide iniciar una nueva vida en su país de adopción. Pero antes deberá ajustar cuentas con su pasado y con sus verdugos. No puedo detallar el argumento más allá aquí sin desvelar datos cruciales. Sólo decir que tras un comienzo desconcertante, poco a poco todo (o casi todo) va encajando como piezas de un puzzle. En este sentido el guión es un mecanismo perfecto. La cruz de esto es que todo queda tan definido que en el momento en el que algún elemento no encaja, su resolución da lugar a momentos algo forzados y poco creíbles (por ejemplo el hombre del periódico y su falsa muerte entre otros).
La película es suspense al noventa por ciento. Sólo al final de la cinta ese suspense, tras el desenlace, se vuelve drama (o melodrama) y desemboca en un bonito final. Estética y visualmente, el film obedece por completo a los cánones del género con escenas fotográficamente impresionantes. La banda sonora del maestro Ennio Morricone enfatiza esta estética de manera genial (uno de los grandes aciertos de la película) y la viste de un ambiente inquietante. En definitiva, una buena película de factura clásica que no decepcionará si no somos demasiado puntillosos.