Enfrentamiento interesado
Varios medios de comunicación se están haciendo eco estos días de los preparativos de la manifestación que tiene lugar hoy en Barcelona contra los recortes que el Tribunal Constitucional ha realizado sobre el Estatuto de Cataluña. También han confrontado estos sentimientos de reivindicación de una identidad con los del sentimiento ¿patriótico? español a causa del campeonato del mundo de fútbol, alabando la profusión de banderas rojigualdas en los balcones y las camisetas portadas por gentes de todas partes y condiciones. Incluso el otro día salieron imágenes de Bilbao y de la propia Barcelona durante las celebraciones por la victoria de la selección frente a Alemania.
Sí, he dicho confrontación. Estos medios indirectamente han dado a entender que reivindicar más autogobierno y que un tribunal no cercene lo que el pueblo ya ha decidido es incompatible con el orgullo por una selección española que nos representa a todo. Eso significa que no han entendido nada y que ambos sentimientos, el orgullo por la tierra materna y el sentido por el triunfo de una colectividad de la que ellos también forman parte, pueden convivir y de hecho conviven. Porque la España del siglo XXI ha de ser plurinacional, formada por territorios con un autogobierno similar al de muchos Estados soberanos, y englobados dentro de otra entidad mayor. Así ha de ser, porque España es esto y no otra cosa.
Podría poner muchos ejemplos de todo esto. Pero atengámonos a la prensa catalana (que no catalanista), como La Vanguardia y El Periódico. El primero tiene una poco sospechosa vocación monárquica española. De hecho hace no mucho, con motivo del 125 aniversario del diario, los Reyes acudieron a su redacción. A la vez fue uno de los medios que firmaron aquel famoso editorial conjunto en defensa del Estatuto y contra su recorte. Lo mismo podemos decir de El Periódico, propiedad del Grupo Zeta (también editor de Tiempo e Interviú). En cuanto a los personajes públicos (políticos aparte) que han querido significarse –muchos no lo han hecho quizás por temor a un boicot fuera de Cataluña– está el piloto de pruebas de Ferrari de Fórmula 1 Marc Gené. En cuanto a políticos, el Ministro de Trabajo (sí, del Gobierno de España) Celestino Corbacho acudirá a la marcha…
Pero muy poca gente de fuera de Cataluña pueden entender esta, para ellos, esquizofrenia ideológica. Yo les recomendaría que fueran entendiéndolo. Porque defender un Estatuto de Cataluña sin recortes no es ser independentista ni odiar a España.