Harald Blåtand
La tecnología bluetooth está cada día más presente en nuestros aparatos. Teléfonos móviles, ordenadores, reproductores de DVD y otros chismes electrónicos. Este mecanismo de comunicación se están convirtiendo en uno de los más eficaces y rápidos en las distancias cortas. Pero, ¿de dónde viene ese nombre tan curioso («diente azul» en castellano)? ¿De dónde proviene ese extraño símbolo en forma de «B»?
Para hablar del origen del nombre hay que remontarse al siglo X de la historia nórdica. En aquellos tiempos reinaba en Dinamarca un monarca llamado Harald Blåtand (o Harold Bluetooth en su traducción al inglés) que pasó a la historia por ser el unificador de todos los reinos daneses por medio de la diplomacia y la persuasión. El rey demostró que comunicándose todos pueden entenderse sin importar su procedencia o ideas. El sistema bluetooth es precisamente eso, intercomunicación entre dispositivos de muy diferentes características y fabricantes. En cuanto al símbolo, está formado por las runas correspondientes a las letras «H» de Harald y «B» de Blåtand.
El bluetooth fue ideado por la compañía sueca Ericsson a mediados de los años noventa. A principios de esta década, los primeros teléfonos móviles comenzaron a incluir esta característica. Rápidamente, en parte gracias a ser un estándar abierto, se ha extendido a todas las marcas y dispositivos.