‘Zamora en imágenes’ se renueva
Por fin, y tras varios meses de preparativos y desarrollo, está lista la nueva web de ‘Zamora en imágenes’. Con esta son ya seis las versiones realizadas, mejorando a cada nuevo paso. Este es, posiblemente, el cambio más profundo que sufre la web. No por la estética ni por la programación, que también han mejorado, sino porque he renovado absolutamente todas las fotografías. Si hasta ahora ‘Zamora en imágenes’ tenía 171 vistas a un tamaño máximo de 400×300 píxeles, ahora son 243 a una resolución máxima de 2000×1330 píxeles. La mejora salta a la vista. Pero este tamaño máximo es sólo una opción. Por defecto las fotos salen a 600×400 píxeles y las miniaturas a 125×75 píxeles. Tampoco he escatimado en la calidad de compresión. Cada una de ellas «pesa» entre 700 Kb y 1,5 Mb, con lo que el nuevo ‘Zamora en imágenes’ ha «engordado» bastante hasta llegar a los 230 Mb.
Como novedad he incluido una opción que he llamado ‘La caja de zapatos’ y que permite descargar todas las viejas fotos de las antiguas versiones en un paquete comprimido. Y hablando de opciones, como siempre me queda la asignatura pendiente de las panorámicas. Prometo incluir algunas dentro de poco, cuando investigue lo suficiente para poder manejarme con el QuickTime VR.
Breve diario de ‘Zamora en imágenes’
Las primeras ideas sobre la nueva web surgieron a finales del año pasado. No eran más que buenos propósitos y no llegué a concretar nada. Simplemente tenía algo en la cabeza que aún no sabía como plasmar. En mayo de este año intenté poner en claro qué es lo que quería hacer, cómo quería organizar la web, cómo tendría que estructurar la base de datos y algunos otros aspectos generales.
Hacia junio tuve que elegir cómo quería programarla. Si quería reforma o ruptura. La ruptura suponía comenzar desde cero. Nueva programación, nuevo concepto de web… Aunque tenía tiempo, no me apetecía meterme con nuevas tecnologías de desarrollo. Pensé que lo realmente importante eran las imágenes, y el contenedor de esas imágenes debía ser atractivo, pero no requería grandes alardes de programación. Además los usuarios no notarían mucho esos cambios.
En julio llegaron las vacaciones en Zamora. Era el momento perfecto para pasar a la acción y hacer las nuevas fotos que irían en la web. Entre los meses de julio y agosto tomé 1329 fotografías de casi todos los rincones de la ciudad. No hace falta que diga que el trabajo de selección de las imágenes fue muy largo y constó de varias fases hasta que por fin quedaron las afortunadas. A él dediqué prácticamente todo el mes de septiembre y parte de octubre, salvo algunos días para crear los primeros prototipos (por cierto, todos fracasados) del futuro interfaz de la web.
Una vez que seleccioné las imagenes, era el momento de procesarlas, corregir el color, crear los diferentes tamaños y encontrar el ratio de compresión óptimo para cada uno de los formatos. A continuación era el momento de la documentación, de buscar información de todos y cada uno de los monumentos y lugares para incluirla en la base de datos. Éste fue el trabajo más tedioso. Me tomé mi tiempo para hacerlo.
Las últimas dos semanas de noviembre las dediqué a la programación y el diseño del interfaz. En cuanto a la programación resolví algunos problemas con el buscador de imágenes y mejoré el método de carga de las fotos.
El interfaz
A la hora de ponerse delante del ordenador a diseñar el interfaz de una web es bueno tener una idea de lo que se quiere hacer, aunque en el caso de ‘Zamora en imágenes’, esto no fue del todo productivo, porque me cerré demasiado al diseño que quería hacer y me olvidé de otras posibilidades mucho más rápidas y con resultado tan bueno o mejor. Es cierto eso que dicen de que más vale mejorar algo que tengas hecho que comenzar de cero en cada nueva versión. Esa máxima la he aplicado en este caso. Lo importante eran las fotos, por eso el interfaz debería ser lo menos «intrusivo» posible. Opté por colores uniformes que no molestaran y que realzaran las fotografías, que es el objeto de la web.
La programación
Tenía bastante claro que quería mejorar la navegabilidad de la web y eliminar la recarga de toda la web cada vez que se quiera visualizar una fotografía. Para ello he tenido que traicionar en cierto modo el uso de los estándares de la W3C. Esto suponía dar un salto al vacío, porque me podía crear nuevos problemas a la hora de probar la web en varios navegadores y sistemas operativos (Internet Explorer y Firefox en Windows, Safari y Firefox en Mac OS X y Firefox y Konqueror en Linux). Por suerte, las pruebas fueron bastante bien y los errores se solucionaron, aunque no sin algunos esfuerzos y disgustos por mi parte. Tal fue el caso del Internet Explorer, al que me costó «domar» un par de días.
Pero como siempre pasa en estos casos, muchas buenas ideas que quería aplicar se han quedado por el camino, víctimas de las incompatibilidades y de las inconveniencias graves. Es el caso de las capas semitransparentes, las animaciones de precarga o los mapas de Microsoft Virtual Earth.
En definitiva…
Ahora ya sólo queda disfrutar de la web y desearos que os gusten las fotos. ‘Zamora en imágenes’ está licenciada bajo Creative Commons, que permite el uso libre de las imágenes para propósitos no comerciales siempre que se cite la fuente donde fue obtenida y se me comunique dónde aparecerá.