‘REC’ y la piratería
Es lo que tiene la curiosidad combinada con el acceso a una cantidad de información prácticamente ilimitada. Uno intenta siempre ir más allá. Por eso cuando vi que ‘REC’ estaba en el eMule me decidí a bajarla. Sinceramente tenía curiosidad, aunque nunca hubiera ido al cine a verla. Por lo que había oído, visto y leído, la idea parecía buena y original y en seguida me recordó a otra película: ‘El Proyecto de la Bruja de Blair‘, casi un fenómeno sociológico a finales de los noventa. Lo que demostraba esta película era la capacidad de generar inquietud sólo con la insinuación de lo extraño y valiéndose de la verosimilitud, un recurso mucho más efectivo que cualquier efecto digital. Sobre ‘REC’ diré que no se le parece ni por asomo y aquí el intento de parecer verosímil no hace más que agravar sus defectos. Aunque no pude terminar de verla, la sensación de falsedad y de teatralidad hacían muy difícil creerse la ambientación y unos personajes que sobreactuaban. En definitiva más ruido que nueces. No os la recomiendo.
Dije que no pude terminar de verla porque a eso del minuto 25 más o menos aparece uno de esos anuncios anti-piratería que ponen en la tele o en el cine donde se equipara el robar un coche o un bolso a bajarse una película de internet. Formaba parte de una campaña torpe, inútil y además falsa, que sólo tiene el propósito de amedrentar a los adolescentes que desconocen las leyes. Frases tan lamentables como «El robo en internet queda registrado» (que alguien me lo demuestre), «El robo es ilegal» (ahora me entero) o «La piratería es delito» (se les olvidó poner que sólo si es con ánimo de lucro). Este argumentario choca frontalmente con las declaraciones de Jorge Martín, Jefe del Grupo de Seguridad Lógica de la Brigada de Investigación Tecnológica de la Comisaría General de Policía Judicial. Dijo literalmente en una conferencia en el pasado Congreso de Webmasters en Madrid que «podéis bajar lo que queráis del eMule. Pero no lo vendáis». Más claro imposible.
Más que asustar a la muchachada con mensajes en las películas que se descargan, lo que se debería es fomentar los descuentos en el cine para los jóvenes, los estudiantes, los universitarios o aquellos con bajos ingresos, publicitar el uso de las videotecas de las Bibliotecas Públicas (de donde yo saco mis películas normalmente) y otras medidas que sería conveniente poner en marcha.