6 de abril de 2010
Los que me seguís desde hace mucho tiempo sabréis de mi gusto por los lugares peculiares, países extraños o chocantes. Ya he hablado aquí, por ejemplo, de las islas Diómedes en el estrecho de Bering, entre Estados Unidos y Rusia. También son unas islas este enclave francés en norteamérica, la única colonia que existe en norteamérica. Su nombre nos puede resultar casi de chiste: San Pedro y Miquelón (Saint Pierre et Miquelon). Hacen referencia a las dos islas principales que forman el archipiélago. Su situación, como digo en América del Norte, es tal vez una de las peculiaridades de este lugar.
Buscando información me encuentro con que, según la Wikipedia, se trata de uno de los territorios americanos más tempranamente poblado por occidentales. Hacia el siglo XVI Se convirtió en una base temporal para marineros y pescadores (sobre todo balleneros) franceses y vasco-franceses (Miquelon proviene del euskera antiguo Mikeleune). Ya en el siglo XVII se tienen noticias de asentamientos fijos de población en el lugar. Recordemos que por aquellos tiempos la mayoría de norteamérica estaba aún inexplorada y virgen para los pioneros holandeses, ingleses, franceses y españoles. El XVIII sería un siglo de luchas entre británicos y franceses. Los primeros consiguieron hacerse con las islas en varias ocasiones, aunque finalmente fue devuelta definitivamente hacia la segunda década del siglo XIX.
Es curioso pensar que, durante la segunda guerra mundial, San Pedro y Miquelón se mantuvo fiel a la Francia ocupada de Vichy, con lo que canadienses y estadounidenses tenían al enemigo nazi casi a las puertas. Los primeros incluso barajaron la posibilidad de invadir las islas para neutralizar su apoyo en caso de un ataque alemán, aunque finalmente no ocurrió. En la actualidad forma parte de los territorios franceses de ultramar junto a otros cinco.
Una curiosidad más. En la bandera no oficial de San Pedro y Miquelón aparece, entre otros símbolos, la ikurriña, en referencia y homenaje a los pescadores vascos que cofundaron la colonia pionera.
5 de abril de 2010
Hay determinado tipo de noticias que nacen envenenadas y crecen, se amplifican y se hinchan por intereses ajenos a los propios hechos. Son fácilmente identificables y se caracterizan principalmente por lo insustancial y olvidable del asunto en cuestión, por la necesidad por parte de algunos de buscar culpables y, también por parte de los mismos, de incluir la noticia dentro de un hipotético supuesto mayor y generalmente catastrofista. La gran mayoría de las veces, la política está detrás. La política de las dos partes (izquierda o derecha, dependiendo del caso).
Me voy a ocupar del ya famoso incidente de la Mezquita-Catedral de Córdoba del pasado miércoles. Un grupo de seis jóvenes musulmanes austríacos intentaron rezar dentro del recinto del monumento. La seguridad privada les llamó la atención y se lo impidió. Hasta ahí los hechos probados. La noticia cambia notablemente dependiendo de los medios que consultemos. Desde unos que dicen que uno de ellos llevaba una navaja y agredió a uno de los guardas hasta que eran un «comando organizado» dispuesto a sabotear los actos católicos, pasando por matices de todo tipo y color. La organización que organizaba la excursión a España (con 118 participantes) es la Asociación de Jóvenes Musulmanes de Austria y ya ha pedido disculpas y ha lamentado lo ocurrido.
Más allá del hecho puntual y anecdótico, los de siempre han sacado punta a sus lápices y han arremetido por el mismo precio contra la próxima Ley de Libertad Religiosa, contra la Alianza de Civilizaciones y, por extensión, contra Zapatero. Lanzan la voz de alarma agitando el falso fantasma de la «islamización» y la «permisividad» con estos hechos en España. Todo eso aunque los musulmanes de la noticia sean austríacos. Sobre todo a pie de calle se suele argumentar que en los países islámicos no es posible rezar al dios católico en una mezquita. Además de demostrar el poco conocimiento que tienen de los países islámicos (en la mayoría de ellos hay libertad religiosa), tampoco tendría mucho sentido… Está claro que en estados radicales como Arabia Saudí, Siria o similares no se puede hacer algo así. Recordemos que son países teocráticos, dictaduras religiosas donde la ley imperante es la de dios y no la del ciudadano. Es decir, el Estado ideal (en versión católica) para aquellos que tanto vociferan y critican de los demás. Si por ellos fuera…
4 de abril de 2010
Suelo aprovechar las vacaciones de Semana Santa para llevarme un buen puñado de nuevos discos, normalmente lanzamientos recientes o aún no publicados que apuntará lo que va a ser la temporada. No en vano muchos de los trabajos que suelen salir en estos meses están luego entre lo mejor. Uno de esos discos que me han acompañado en estas musicales fiestas es ‘Congratulations’ de MGMT. Antes de nada decir que apenas había escuchado nada de ellos. Hasta la fecha era el típico grupo destinado a ser un fenómeno pasajero que todos los críticos alaban y en menos de un año nadie se acuerda de ellos.
Pero, como tantas veces, me equivocaba. ‘Congratulations’ es el segundo disco de la banda estadounidense y ha cambiado por completo el concepto que tenía de ellos (si es que tenía alguno) e incluso ha cambiado el concepto que tengo de la música en general. Con este trabajo queda claro que aún hay esperanza y que se puede innovar sin perder los papeles, hacer pop de 2010 y a la vez ser accesibles. Vale que MGMT no han inventado nada nuevo, pero consiguen contener en un disco un batido de sonidos que en manos de otros hubiera sido inmanejables. Estos chicos combinan con talento poco visto la psicodelia sesentera y setentera, sintetizadores analógicos, rock progresivo o soul.
El resultado es coherente, imaginativo, emocionante y, en definitiva, brillante. Es complicado quedarse con un tema, incluso con dos o tres de los nueve de que consta ‘Congratulations’. Sería complicado, pero me ha cautivado especialmente ‘Siberian breaks’, una canción de más de doce minutos compuesta de pequeños temitas de dos o tres minutos. Personalmente me ha dejado sin palabras. Han lanzado ya un sencillo titulado ‘Flash delirium’, cuyo vídeo no debéis perderos… En definitiva, mucho tienen que cambiar las cosas para que este no sea mi disco favorito del año.