‘Rompepistas’
Justo acabo de terminar la última novela de Kiko Amat. Su título es ‘Rompepistas’ (2009) y llevaba mucho tiempo queriendo leerla. Al igual que su otro libro, ‘Cosas que Hacen BUM’ (2007), la sensación de haber leído algo «diferente» sigue en mi cabeza pocos minutos de haber cerrado su última página. Ya lo comenté cuando escribí entonces, pero no puedo dejar de sorprenderme por la prosa explosiva, original, atropellada y onomatopéyica de Amat. Cierto que puede resultar algo anárquica, pero eso también forma parte de su encanto.
La novela transcurre en el mes de junio de 1987 y cuenta la historia de Rompepistas, un punk skinhead (un redskin, se entiende), que vive en una ciudad indefinida del extrarradio de Barcelona (¿Sant Boi, la ciudad natal de su autor?), junto a sus amigos, también de curiosos nombres: Clareana, su exnovia, Carnaval y el Chopped. Matan el asco y el tedio de vivir en un lugar sórdido y sin futuro con su banda, Las Duelistas, emborrachándose y haciendo de las suyas. En el fondo, y como se verá, no son más que chicos de diecisiete años que han nacido en el lugar y en el momento equivocado. La vida y algunos hechos concretos les harán reflexionar.
Como ocurría en ‘Cosas que Hacen BUM’, Kiko Amat hace continuos guiños a la cultura mod, punk y skin, citando sin parar bandas o marcas de ropa. El ambiente musical está siempre presente e incluso, si echáis un vistazo al tercer párrafo de la página 231 os encontraréis con esto:
«Para empezar me leí en la cama un tebeo de Spiderman que casi no recordaba.»
¿Os suena, verdad? Lo curioso es que, a pesar de que las notas finales son bastante nutridas, no se hace mención a Los Planetas por ninguna parte. ¿Le traicionaría el subconsciente?. Anécdotas aparte, al final del libro, detrás de esas notas encontramos más referencias musicales. Por un lado los discos que escuchó Kiko Amat mientras escribía la novela, y por otro una especie de banda sonora de lo que es el libro, con todas las canciones (o muchas de ellas) que «suenan» en el transcurso de la historia. Ahí están The Clash, The Beat, The Specials, The Jam, Brighton 64 o Madness entre muchos otros. Todo un detalle.