Pequeños nacionalismos despreciados
La historia de los pequeños nacionalismos o regionalismos es la de la incomprensión. Si ya de por sí algunos no entienden (no me refiero a no compartir sus ideales) los nacionalismos mayoritarios dentro de España, cómo se va a comprender a los pequeños… Estoy aludiendo a movimientos como el de Tierra Comunera, el de los diferentes partidos leonesistas (UPL, PREPAL y Conceyu Xoven) y asturianistas (Unidá y Unión Asturianista). Los únicos que tuvieron su momento de gloria fueron la Chunta Aragonesista, gracias a la cara conocida de Labordeta.
Todo esto viene al hilo de un artículo que he leído en el blog ‘Sofía y el Sexo’ (y que no voy a enlazar) sobre partidos minoritarios. Es verdad que algunos son grotescos, pero dentro de ellos se incluye al Partido Regionalista del País Leonés (el PREPAL), una formación con bastante historia, aunque ahora no pase por sus mejores momentos. En tono irónico cuenta lo siguiente:
defiende los intereses de esa antigua nación, estigmatizada y hundida por el centralismo madrileño-castellano, desde aquí les deseamos lo mejor en la defensa de su lengua y su ancestral cultura. Nunca hablar de forma defectuosa y escribir con faltas de ortografía estuvo tan premiado.
Esta última frase va con un enlace. Pinchando en él… ¡voilá!, aparece el cartel que ilustraba un artículo de rmbit donde se aludía a un curso de lengua leonesa impartido en Zamora. No acabo de saber a qué se refiere con eso de hablar de forma defectuosa o escribir con faltas de ortografía. Supongo que a gente que lucha porque el leonés perviva y no se pierda para siempre, como la asociación El Fueyu, no les habrá hecho demasiada gracia… ¿Es que hace falta tener representación parlamentaria para ser respetable? ¿Por qué por estas tierras queremos tan poco lo que es nuestro y machacamos la diversidad cultural?