Con esta nueva entrega llegamos al octavo capítulo de ‘Viaje a Barcelona’, dedicado al Arco de Triunfo y al Parque de la Ciudadela. Tanto uno como otro fueron ideados para la primera exposición universal que se realizó en España, la de 1888. De entonces nos quedan algunos edificios y monumentos además del propio arco. Este vídeo es un repaso parcial por algunos de esos lugares y construcciones y que en su momento nos depararon más de una sorpresa. En la Ciudadela también están los restos del fuerte del siglo XVIII. Uno de esos edificios que se mantuvieron tras su destrucción a finales del XIX fue el del Parlamento de Cataluña.
Igual que la anterior entrega, es un clip corto –menos de dos minutos– y sencillo acompañado de la música de Blue States y el tema ‘The Windfield Audition’. Así que sin más os dejo con él:
Hace más de dos años escribí un post con las últimas noticias que la empresa de cámaras de cine digital Red había lanzado sobre su nuevo modelo. La Red Scarlet se convirtió, ya entonces, en uno de los objetos de deseo de los cineastas aficionados y, en general, de todo amante de la tecnología audiovisual. Desde entonces muchas nuevas noticias que aumentaban la expectación. De nuevo los fans de Red han animado los foros al verse el primer clip de una Scarlet totalmente funcional y que poco tiene que ver con aquellos primeros prototipos.
Lo revolucionario, aparte de que consigue filmar hasta a 120 fotogramas por segundo a una resolución 3K (tres veces más que la alta definición convencional) en tarjetas de memoria Compact Flash, es que no es necesario adquirir ningún accesorio para ponerse a funcionar. Para ello cuenta con una lente integrada (al menos en el modelo Fixed, que es el que aparece en el vídeo) de distancia focal variable (en equivalentes a un sensor de fotograma completo de 28-224mm) y una pantalla táctil de 5 pulgadas. El peso del equipo, según las informaciones, es de unos dos kilogramos.
Evidentemente no se trata de una máquina que llevarse de viaje para grabar las vacaciones familiares, pero su asequible precio (saldrá por unos 2200 euros, menos que una Canon EOS 5D MkII), ha hace muy atractiva para aquellos que se quieran adentrar en el mundo del cine. Además, las versiones sin lentes serán compatibles al menos con los objetivos de Canon y Nikon, lo cual también supone un grandísimo avance. De momento, en la web de Red aún no pueden verse las características completas.
Space fue una banda francesa de los setenta pionera del electro-pop. Seguía la estela de un imaginario tecnológico y espacial de su compatriota Jean Michel Jarre o de los alemanes Kraftwerk. El tema ‘Magic Fly’ fue un exitazo en 1977. Por el nombre quizás no los conozcáis, pero en cuanto pulséis el play en el vídeo lo reconoceréis al instante…
Si algo caracteriza a internet es que es libre. Cualquiera puede tener su hueco, su espacio, accesible desde todos los rincones del planeta y contar en él lo que quiera con la sola limitación de su imaginación. Desde hace un tiempo, los modos en que podemos expresar esas ideas se ha multiplicado con la aparición del contenido multimedia, ya sean vídeos, imágenes o sonidos. Pero como todos sabemos, la libertad es extraordinariamente frágil. Y por supuesto la censura es su principal enemiga. Se manifiesta con muchas caras, la mayoría de ellas no como tal, sino mucho más sutiles. Incluso en los países más libres existen formas de censura aceptadas y autocensura.
La arquitectura de internet por definición es descentralizada, pero no ocurre lo mismo con algunos servicios como el correo electrónico o la world wide web. Ésta se encuentra centralizada en servidores, generalmente de empresas privadas que comercian con este alojamiento. Si el contenido alojado es considerado «peligroso», «ilegal» o «no conveniente», el acceso a esos servidores puede ser restringido o suprimido por las autoridades de determinados países mediante procedimientos sencillos (por ejemplo un cortafuegos). Pero, ¿Qué ocurriría si en vez de usar servidores para alojar la información de nuestro sitio web, esta se almacenara en nuestras propias máquinas?
A grandes rasgos esta es la filosofía que subyace detrás del proyecto Freenet. Se trata de una iniciativa sin ánimo de lucro que ha desarrollado las herramientas necesarias para utilizar la web mediante arquitectura de pares (p2p) de forma que las conexiones se realizan de ordenador a ordenador, sin la necesidad de acceder a un host de información centralizada. Existe una clara analogía en la historia de la libre distribución de archivos MP3: El error de Napster fue crear una topología centralizada. Todas las peticiones tenían que pasar por el nodo central para poder ser servidas. Su final estaba cantado, con cerrar el servidor sería suficiente para hacer caer todo el sistema. Pero fue entonces cuando surgió eDonkey y su revolucionaria arquitectura de pares. Ya no había nodo central y (simplificando mucho) todas las peticiones pasaban directamente al ordenador destino, previa consulta de un índice (alojado, esto sí, en un servidor) de computadoras conectadas y compartiendo el archivo requerido. La gran diferencia es que ese índice podía estar alojado en cualquier servidor. De hecho hoy día clientes p2p como eMule pueden conectarse indistintamente a cientos de servidores diferentes.
Estos días pasados he estado probando Freenet y, aunque aún es un sistema lento (depende de las conexiones de los usuarios) y rudimentario (precisamente la velocidad condiciona la estética y el tipo de contenidos que pueden incluirse), es una poderosísima herramienta que deja a un lado el uso de servidores centralizados y supone un retorno a la información pura y dura. Probablemente el uso de Freenet se vaya popularizando con el tiempo y el proyecto crezca y mejore. La revolución y la expansión de los contenidos digitales es imparable y no existirá censura que lo pueda detener.
El repaso de lo mejor de 2010 en el panorama del indie-pop internacional puede resumirse en mi humilde opinión con un calificativo: escaso. Bien es cierto que esto es simplificar mucho y que, como veremos, este año que termina nos deja grandes obras, pero también una manifiesta falta de ¿imaginación?. El afán de muchos por mimetizar el sonido y la estética ochentera tiene un límite. Hemos visto como en estos doce meses han surgido decenas de nuevas bandas, a menudo puros hypes, que parecían salidos de la MTV de hace dos o tres décadas. Quizás los más exitosos, incluso dentro del circuito comercial, hayan sido Hurts. Son el prototipo perfecto. Pero junto a ellos también ha surgido otras más imaginativas y con más gracia como Fan Death, que si bien copian a bandas del italo-disco de la década de los 80, recontextualizan su sonido haciéndolo más fresco. El año 2010, en definitiva, no pasará a la historia por la abundancia y originalidad de sus propuestas, pero al menos nos ha dejado una pequeña joya para la posteridad. Me refiero a ‘Congratulations’ de MGMT.
Sí, MGMT. Y es que el dúo neoyorkino de pop progresivo-psicodélico-espacial lo ha conseguido todo este año. ‘Congratulations’ es el indiscutible mejor disco de 2010, se mire como se mire, y ‘Siberian breaks’ la mejor canción. Elegí esta especie de suite en varios movimientos porque resume perfectamente lo que hay en este trabajo. Probablemente si existiera una lista de mejores videoclips del año (quizás algún año lo haga), también se lo llevaría MGMT con ‘Flash delerium’. Más allá de MGMT hay otras cosas, no muchas, pero las hay. ‘Write About Love’, el nuevo disco de Belle & Sebastian llegó casi al final y, sin decepcionar del todo, tampoco era lo que se esperaba de ellos. Ocupa la cuarta posición. ‘I want the world to stop’, el sencillo de presentación, es sin embargo uno de los temas imprescindibles de la temporada. Ocupa la segunda posición de canciones.
2010 ha sido también el año en el que han vuelto no sólo Belle & Sebastian, sino los aclamados Arcade Fire con ‘The Suburbs’, un gran disco que supera a ‘Neon Bible’ pero sin llegar a las cotas de su debut y que es mi tercer trabajo favorito del año. Otros aclamados, Vampire Weekend, volvieron justo al empezar el año con ‘Contra’, un álbum grande, grandísimo, que demuestra definitivamente que la fusión de sonidos aparentemente imposibles es posible. Otra piedra angular para los apasionados del afro-pop. Un disco fresco y vital como pocos. A mi me ha gustado y por eso sigue al de MGMT en la lista. Y para cerrarla, Joanna Newsom, una chica californiana que toca el arpa y canta con un peculiar estilo. Su disco ¡triple! ‘Have One on Me’ contiene temas de desarrollos largos, algunos muy largos, repletos de orquestaciones sutiles que enganchan y nunca aburren. Además, su tema ’81’ cierra la lista de canciones. Of Montreal, aunque al final no se han colado en la lista de discos, merece la pena no perderlos de vista. ‘Coquet coquette’ parece seguir un poco la estela psicodélica, facturando un tema grande y bonito que ocupa la cuarta posición de canciones.
A partir de aquí, el panorama es muy fragmentario. Muchos discos quizás escuchados sin demasiada atención, pero con momentos memorables. Ahí están los británicos Hot Chip y ‘Hand me down your love’ (séptima posición), el sonido retro-synth (parecen discípulos de Broadcast) de los franceses Karaocake y ‘It doesn’t take a whole week’ (tercera posición), el descaro de ‘Cannibal’ de Fan Death (atención a su videoclip) (quinta posición) o la melancolía de Lissie y ‘In sleep’ (sexta posición). Para terminar un añadido de última hora. Una de mis bandas favoritas y por la que siento especial debilidad, Ladytron, publican un tema inédito, ‘Ace of Hz’, que irá en su grandes éxitos que se lanzará el año que viene consigue hacerse un hueco en la octava posición.
Conclusión: prácticamente en el primer tercio del año ya estaba todo el pescado vendido. Salvo cosas de última hora, la temporada internacional ha sido previsible e incluso aburrida, lo que me ha permitido escuchar los discos con más detenimiento y profundidad de lo que acostumbro. Como curiosidad decir que, por primera vez en la historia de estas listas, he encontrado más videoclips nacionales que internacionales. Tres menos para ser exactos. Por eso he decidido suplir esta carencia con actuaciones en directo de esos temas. Espero que el 2011 sea un poco más abundante:
Ha llegado la hora de echar la mirada atrás. Los doce meses del 2010 nos han traído muchas novedades, sorpresas agradables la mayoría, y retornos esperados (algunos mucho, como el de Los Planetas). Pero si hay una palabra que defina el panorama del pop independiente nacional es abundancia. Este es uno de esos años en el que me gustaría que en la lista de canciones cupieran veinte temas y en el de discos diez. Muchas grandes canciones se han quedado fuera y también discos muy sonados, pero que dado lo apretado de la oferta, se han quedado a las puertas. Es lo que ocurre con ‘Una Ópera Egipcia’ de Los Planetas, ‘Año Santo’ de Triángulo de Amor Bizarro, ‘LP2’ de Los Punsetes o ‘Rompecabezas de Moda y Perfección Moral’ de Ornamento y Delito por poner sólo tres ejemplos.
La gran noticia es que, después de unos cuantos trabajos, los murcianos Klaus & Kinski por fin consiguen situarse en lo más alto. El premio imaginario a mi disco nacional favorito de 2010 es para la banda de Alejandro y Marina y el estupendo ‘Tierra, Trágalos’. Siempre fieles a su estilo, ofrecen variadas melodías con unas letras a caballo entre la ironía y la profundidad. Su tema ‘Forma, sentido y realidad’ también cosecha éxitos situándose en la segunda posición de la lista de canciones. Klaus & Kinski comparten con El Guincho el protagonismo de lo mejor del año. Con sus sonidos tropicales, caribenos o africanistas (o como queramos llamarlo) y su pop ochentero ha captado mi atención hasta el punto de que su tema ‘Bombay’ ocupa el primer puesto de canciones nacionales. Su disco ‘Pop Negro’ queda en el segundo lugar en álbumes. Pero la ola de «etnicismo pop» no se queda aquí. Los largos desarrollos de house pop onírico de Delorean nos recuerdan un poco a Animal Collective y son sin lugar a duda una de las bandas con sonido más vanguardista, marcando tendencias incluso a nivel mundial. ‘Subiza’ se cuela en la tercera posición de álbumes. Si quieres saber dónde esta lo más avanzado del indie nacional tienes que escucharlo.
Uno de los fenómenos en alza, y que ya se han confirmado en 2010, es la supremacía absoluta de internet como medio para difundir la música. Webs como Bandcamp nos permiten descubrir maquetas o discos autoeditados de gran calidad. De la red salen bandas como Salonica y su impresionante canción ‘Puzzle’, Los Ingenieros Alemanes y la «planetaria» ‘Saber y Ganar’ o Los Directivos con su ¡por fin! primer y estupendo largo ‘Por Amor y Jerarquía’ y canciones pegadizas como ‘Ellas me llaman de usted’. Mención aparte merecen los oscuros y «nachoveganianos» Ornamento y Delito. Sus temas brutales y con letras polémicas y algo irónicas como ‘El Madrid de los Austrias’ (parecía imposible mezclar en una misma canción a José Antonio Primo de Rivera, Don Pelayo o el 11-M) ocupan la segunda posición en mi lista de canciones favoritas. Se ha quedado a las puertas de mi lista de discos favoritos.
Completan este repaso rápido por lo mejor del indie patrio de 2010 los mallorquines Papá Topo y su falso «tonti-pop»con un himno veraniego aparentemente absurdo como es ‘Lo que me gusta del verano (es poder tomar helado)’ o los veteranos Lori Meyers. El retorno de los de Granada nos ha sorprendido a todos después de desconcertarnos con su giro estilístico. ‘Cuando el Destino nos Alcance’ cierra la lista de los cinco discos nacionales favoritos de la temporada y ‘Mi realidad’ ocupa también la quinta posición en canciones. Veteranos son también los gallegos Nadadora. Aunque su disco es irregular, ‘Una nueva vida’ –su sencillo– merece cerrar al menos la lista de temas nacionales.
Rebuscando por internet como tantas veces uno se encuentra con cosas curiosas. Una de ellas es la que os presento hoy. Probablemente la mayoría de vosotros, como yo hasta hace poco, nunca había oído hablar de la palabra guilloché o guilloche sin tilde, pero muchos sabréis de que se trata. Estoy convencido de que algunos habéis utilizado un espirógrafo, esas rueditas dentadas llenas de agujeros que giraban en torno a un eje descentrado sobre un tope circular también dentados. En esas perforaciones se introducía la punta de un bolígrafo o un rotulador y haciendo girar la ruedita conseguíamos dibujos increíbles y a veces muy complicados.
Pues bien, estas figuras geométricas generadas mecánicamente basadas en la rotación de ejes descentrados es lo que se denomina guilloche. Aunque aquellas herramientas eran una forma muy rudimentaria de lo que puede llegar a conseguirse, en su versión más compleja fue durante mucho tiempo la base de los billetes de banco y otros documentos oficiales susceptibles de ser falsificados. En los tiempos en que no existían métodos de reproducción automáticos, los guillochés eran el más eficaz modo de luchar contra los hábiles copistas manuales.
En la actualidad, los billetes de banco han simplificado enormemente su diseño. Son más minimalistas precisamente porque las medidas de seguridad ya no pasan en su mayoría por lo que se ve, sino por lo que está oculto (filamentos fluorescentes, motivos de coincidencia, relieves, etc). Por ejemplo, en los modernos billetes de euro ya no encontramos guillochés, tal y como ya ocurrió con la última serie emitida de billetes de pesetas. Tampoco en el actual documento nacional de identidad (pero sí en el anterior). El pasaporte en cambio aún lo lleva en sus páginas.
Si queréis introduciros en el mundo de los guillochés con vuestro ordenador, existen varios programas que permiten la confección de estos dibujos, llegando incluso a poder realizar formas de gran complejidad. Para los que tengáis un Mac existe Excentro, un completísimo software de pago (hay una versión gratuita de prueba) con el que se consiguen resultados profesionales. También SecuriDesign, un complemento para Corel Draw, realiza esta misma función. Si sólo queréis juguetear un poco, probad el sencillo generador de guillochés de SubBlue directamente sobre la web.
rmbit está bajo una licencia de Creative Commons.
Plantilla de diseño propio en constante evolución.
Página servida en 0,061 segundos.
Gestionado con WordPress